En esta oportunidad vamos a comenzar con una serie de reportajes de empresas guatemaltecas, el éxito y fracaso, con el único objetivo de aprender de sus estrategias que pueden ser aplicadas en tu negocio, e incluso, aprender de sus errores.  Comenzamos con uno de los negocios que en sus inicios, causó sensación por su publicidad creativa e impactante, pero ahora en los últimos meses, se ha tenido que enfrentar a una crisis de la que aún no ha podido solventar, me refiero a los restaurantes de ay Carmela.

SUS INICIOS

Ay Carmela surge como un modelo de negocio de comida texmex, nace el 13 octubre del 2017 siendo sus fundadores el señor Estuardo Juárez y su señora madre, Carmen Juárez. Su primer restaurante se ubicó en la zona 4 de Mixco, teniendo como público objetivo a los jóvenes, sin embargo, después de cinco meses, se proyectaron como un restaurante familiar. 

Como todo negocio, necesitaban darse a conocer, querían pautar en medios de comunicación masivos, pero según cuenta el fundador, el presupuesto no les alcanzaba, por lo que decidieron utilizar lo que tenían al alcance en aquel momento: las redes sociales y por supuesto, la creatividad.

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Generaron expectativa, gracias a la utilización de temas de actualidad como el de Badabum, cuando se encontraba en auge el segmento “desenmascarando infieles”, también utilizaron el tema de la Casa de Papel con el lema “hay un atraco, solamente que en ay Carmela”.

Estas campañas fueron exitosas debido a que cuando los clientes llegaban, se tomaban fotos en el lugar y lo subían a sus redes, lo cual permitió que los mismos clientes, fuesen sus emisarios. Generaron otras campañas especiales, como, el día los tatuados, el día de los barbudos, entre otros, en el que ofrecían promociones especiales.

El éxito le sonreía a esta marca y se le auguraba un futuro muy prometedor, tanto que decidieron expandirse, abriendo sucursales en la zona 10 de la Ciudad de Guatemala, otra en Antigua Guatemala y en Villa Nueva. Eran momentos muy gratos, que incluso, en la inauguración de villa Nueva provocó un caos vehicular porque todos querían ir a comer a Ay Carmela.

Nuevas ideas de negocio comenzaron a surgir, poniendo en marcha sus taquerías Ay Carmela, un concepto en el que dejaban a un lado el restaurante, con locales más pequeños, permitía que más personas se decidieran a abrir una franquicia, ya que un pequeño local de venta de tacos era más accesible que un restaurante. Ante esto, deciden cerrar los restaurantes de Villa Nueva y zona 10.

También, a finales del año 2022, dejaron de servir desayunos, una decisión que no fue bien recibida por sus clientes. Sin embargo, hasta aquí, todo parecía ir muy bien, y las decisiones que estaban tomando se consideraban que era para ir mejorando y ajustando su modelo de negocio. 

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El objetivo de este artículo no es afirmar o negar las acusaciones, ya que en esta parte entran los puntos que incluía el contrato, eso ya compete a las instancias legales y de las acciones que los afectados decidan tomar. Nuestro objetibvo, es de analizar una situación que a cualquier empresa podría sucederle y tomar como lección, de que debemos estar preparados con un plan de manejo de crisis. 

Respecto a su creatividad, creo que iniciaron muy bien, pero en el camino fueron perdiendo esa esencia que los dio a conocer, dejando únicamente en fotos muy bien editadas, el manejo de su imagen y publicidad. 

 Pero, dejando a un lado el tema legal, ¿Cuál crees que serían las acciones que debe tomar esta marca ante lo que actualmente está viviendo?  

Nos encontramos en una próxima, invitándote a que nos sigas en nuestras redes sociales.

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